Una de nuestras luchas es ser la misma persona en casa, en el trabajo, entre los amigos, un juego de mil máscaras, mil formas con las cuales hemos de encajar en nuestro día a día en esta sociedad vertiginosa que nos envuelve. Una locura complicada de llevar. Las máscaras nos proporcionan una apacible seguridad, una identidad muy alejada de nuestra autenticidad y nuestra esencia. Tras máscaras de mil colores, llenas de fantasía, está lo que somos para no mostrar nuestra vulnerabilidad o insegurid...